Tumores cutáneos
El término de tumor cutáneo se refiere a la proliferación anormal de las poblaciones celulares de la piel y sus anexos cutáneos. Estos tumores pueden ser benignos o malignos.
Los tumores cutáneos y subcutáneos son los más frecuentes en la especie canina, cuya incidencia se sitúa alrededor del 40-45% del total de neoplasias en esta especie, mientras que en el gato, representan alrededor del 25% del total de neoplasias diagnosticadas. El porcentaje de malignidad en los tumores cutáneos oscila entre el 30-40% en el perro, y el 60-70% en el gato.
Los tumores más frecuentes son: carcinoma de células escamosas, fibrosarcomas, tumores de células basales y mastocitomas.
•Motivo de consulta:
El motivo de consulta por parte de los propietarios suele ser que han observado aumentos de volumen, cambios en la pigmentación y con frecuencia, lesiones en la piel inducidas por autotraumatismo en los pacientes.
De forma general, las neoplasias cutáneas malignas crecen rápidamente, y con frecuencia van acompañadas de dolor y lesiones traumáticas. Por otro lado, las neoplasias benignas pueden generar cierta molestia, pero no causan daños de seriedad.
•Diagnóstico:
El protocolo diagnóstico incluye la historia clínica, el examen físico general y pruebas diagnósticas como pueden ser la citología o biopsia. Ambas pruebas, representan la base para establecer el tratamiento y pronóstico de vida del paciente.
La citología es una prueba diagnóstica no dolorosa, rápida y que no necesita procedimientos de tranquilización. Permite identificar si se trata de un proceso neoplásico, y en su caso, predecir si es un proceso benigno o maligno.
Por otro lado, la biopsia nos permite realizar un estudio histopatológico para conocer el tipo de tumor, benignidad o malignidad, así como la invasión neoplásica de los bordes para prever la aparición de recidivas locales.
En la actualidad, perros y gatos son considerados un miembro más de la familia, por lo que el cáncer ya no es sinónimo de eutanasia inmediata. Ahora es considerado una enfermedad crónica susceptible de ser tratada con 2 objetivos:
*Que el paciente viva el mayor tiempo posible.
*Que el paciente tenga una buena calidad de vida.